Cineastas representan a audiovisual dominicano en Locarno
- por © Redacción-PRODUCCIONLATINA.com

Una delegación de profesionales dominicanas, todas mujeres, representa a la industria audiovisual de la isla caribeña en el Festival de Locarno, Suiza. Es la cuarta vez que el país participa oficialmente en el certamen, y esta vez lo hace con una estrategia múltiple que abarca desde residencias artísticas hasta mesas de coproducción.
Mary Helen Ferreira (Cinefilms) y Kryzz Gautier (Reclaimed Entertainment) son las encargadas de representar al país en "Match Me!", el programa que conecta productoras emergentes con potenciales socios internacionales. Ambas llegan con carpetas bajo el brazo y citas agendadas, conscientes de que en estas conversaciones informales suelen cocinarse las colaboraciones que luego se materializan en pantalla. No son nuevas en esto: el año pasado, Leí González participó en este mismo espacio y ahora regresa invitada a "Open Doors", la sección que este año centra su mirada en el cine africano, buscando tender puentes con el Caribe.
En otro frente, la directora Karen Joaquín prepara maletas para el "Directors’ BaseCamp", una residencia que mezcla disciplinas y nacionalidades. Sus cortometrajes "O que me parta un rayo" (Festival de Málaga 2024) y "Juanita" (Berlinale 2025, codirigido con Uliane Tatit) demostraron una voz particular que ahora busca expandirse entre músicos, escritores y diseñadores internacionales. Mientras, Isabella García, de la DGCINE, agenda reuniones con representantes de plataformas e instituciones, tejiendo la red institucional que facilita estos intercambios.
Esta presencia diversificada no es casual. Detrás hay un trabajo sostenido desde la Dirección General de Cine, que en los últimos años ha priorizado la movilidad profesional y la formación de alianzas estratégicas. Locarno funciona como termómetro: si en 2022 la participación dominicana se limitaba a observadores, hoy tienen representantes en programas competitivos, residencias y espacios de mercado.
El festival suizo, con su Piazza Grande al aire libre y su tradición de descubrir nuevas voces, se ha convertido en un punto de encuentro clave para cinematografías en crecimiento. Entre las proyecciones de películas y las charlas junto al lago Maggiore, la delegación dominicana intercambia tarjetas de presentación y escucha propuestas. Saben que el camino del cine independiente es largo, pero también que festivales como este acortan distancias.
Sigue nuestras noticias por Instagram.
Mary Helen Ferreira (Cinefilms) y Kryzz Gautier (Reclaimed Entertainment) son las encargadas de representar al país en "Match Me!", el programa que conecta productoras emergentes con potenciales socios internacionales. Ambas llegan con carpetas bajo el brazo y citas agendadas, conscientes de que en estas conversaciones informales suelen cocinarse las colaboraciones que luego se materializan en pantalla. No son nuevas en esto: el año pasado, Leí González participó en este mismo espacio y ahora regresa invitada a "Open Doors", la sección que este año centra su mirada en el cine africano, buscando tender puentes con el Caribe.
En otro frente, la directora Karen Joaquín prepara maletas para el "Directors’ BaseCamp", una residencia que mezcla disciplinas y nacionalidades. Sus cortometrajes "O que me parta un rayo" (Festival de Málaga 2024) y "Juanita" (Berlinale 2025, codirigido con Uliane Tatit) demostraron una voz particular que ahora busca expandirse entre músicos, escritores y diseñadores internacionales. Mientras, Isabella García, de la DGCINE, agenda reuniones con representantes de plataformas e instituciones, tejiendo la red institucional que facilita estos intercambios.
Esta presencia diversificada no es casual. Detrás hay un trabajo sostenido desde la Dirección General de Cine, que en los últimos años ha priorizado la movilidad profesional y la formación de alianzas estratégicas. Locarno funciona como termómetro: si en 2022 la participación dominicana se limitaba a observadores, hoy tienen representantes en programas competitivos, residencias y espacios de mercado.
El festival suizo, con su Piazza Grande al aire libre y su tradición de descubrir nuevas voces, se ha convertido en un punto de encuentro clave para cinematografías en crecimiento. Entre las proyecciones de películas y las charlas junto al lago Maggiore, la delegación dominicana intercambia tarjetas de presentación y escucha propuestas. Saben que el camino del cine independiente es largo, pero también que festivales como este acortan distancias.
Sigue nuestras noticias por Instagram.