Producción Latina

26-XII-03

¿Se imagina ser espectador del concierto de Año Nuevo, que dirigirá el próximo día 1 de enero Riccardo Muti en el Musikverein de Viena, una final deportiva, un concierto de Elton John, el estreno de un musical en Londres..., desde la butaca de un cine? La era de las retransmisiones en alta definición (1080 líneas) vía satélite, proyectadas en la pantalla de una sala cinematográfica arranca este próximo jueves 1 de enero en 30 locales a lo largo y ancho de toda Europa (París, Bruselas, Roma, Berlín, Madrid...).

Mientras el cine digital es una realidad que se abre paso lentamente por el alto coste de los proyectores (ya hay 400 en todo el mundo), ahora las salas pueden también aprovecharse para otro tipo de eventos musicales o deportivos, gozando de la calidad de imagen de la alta definición y del mejor sonido Dolby digital.

El cine Luchana de Madrid será por el momento el único en España dotado de la tecnología para recoger las imágenes que servirá en directo desde Viena el satélite Astra y proyectarlas ante más de 500 espectadores. Pero este concierto de Año Nuevo, el de los valses vieneses, sólo será el primero de una serie de eventos especiales que en torno a cinco por mes brindará esta sala de la capital hispana, algunos en vivo y otros pregrabados, según se explicó este viernes en el mismo local. El coste de las localidades se situará por encima del de una película, entre 10 y 15 euros según el espectáculo, que será desde un partido de tenis a un concierto de "heavy", pasando por ópera o ballet.

También se habla de que 2004 como un año trascendental para el sistema digital de proyección fílmica. Las películas podrán llegar a las salas dotadas de estos equipos vía satélite y ser almacenadas en el disco duro de un ordenador, aunque también se abaratará el coste de las copias, esta vez en un disco especial que cuesta menos de 20 dólares, muy por debajo del tradicional celuloide. El único pero es el coste de los proyectores digitales y su equipamiento informático, que ronda los 125.000 dólares, aunque se espera que pronto bajen a la mitad. La palabra también la tienen los grandes estudios, quienes aún sólo apuestan ocasionalmente por hacer copias digitales, dicen que entre otras razones por el riesgo del pirateo. Walt Disney y Warner Bros. son los únicos estudios pioneros en este terreno, y "Buscando a Nemo" y "El último samurai", los últimos títulos en salir al mercado.