Producción Latina

El director y productor dominicano Archie López cuenta con una extensa y exitosa trayectoria de más de 30 años en el sector audiovisual. En 2007 se aventuraba en el mundo de la ficción cinematográfica con la comedia “Mi novia está de madre” y desde entonces no ha parado de cosechar éxitos de taquilla. Algunas de sus películas, como “Lotoman” o “Tubérculo gourmet”, son las comedias más taquilleras de la historia del cine dominicano. Archie López es presidente de Panamericana de Producciones y uno de los profesionales más activos de la industria del cine de la República Dominicana.  Orgulloso de “Luis”, su primer drama, y después de estrenar “Hermanos” en el mes de marzo, trabaja ya en dos largometrajes biográficos y un nuevo drama. Presente en la 71 edición del Festival de Cannes con la Comisión dominicana que promociona el cine nacional, en una entrevista exclusiva para PRODUCCIONLATINA.com, nos habló de sus proyectos y de la Ley de Cine que ha incentivado la industria cinematográfica de la isla caribeña.

- ¿Cómo llegó usted a la producción?
Llegamos a la producción por vía de la publicidad. Nuestra compañía es de producción audiovisual de publicidad, ya tiene 30 años, somos líder en el mercado y la más grande del Caribe. Entonces, fue como nuestro paso natural de evolucionar de lo comercial y lo documental, al cine. Siempre cuando hacíamos los comerciales nos distinguíamos, porque los hacíamos como películas pequeñas, aunque fueran de 30 segundos o un minuto. Por ahí fuimos evolucionando y hace 10 años hicimos nuestra primera película. Bueno, y aquí vamos ya con 10 películas.

- ¿En qué momento y por qué decidió comenzar a dirigir películas?
Creo que fue la evolución natural de nuestra profesión, digamos. Ya habíamos participado como productores asociados de unas películas y también de algunos cortometrajes. Entonces vino natural, me lo propusieron con la primera película y obviamente me encantó, ya llevaba mucho tiempo dirigiendo y al final la pasión es hacer películas.

- ¿Se considera creador de una fórmula personal en la comedia?
No sé si particular, pero sí tenemos nuestra fórmula. Nuestras comedias son las más exitosas de la región y de República Dominicana, pero básicamente nuestra formula es sencilla. Hacemos películas familiares, que funcionen para los niños, para los adultos y que dejen un mensaje positivo al final, que la gente vaya a reírse y se lleve un buen mensaje. A la gente le gusta y agradece eso. Tratamos de no usar palabras obscenas para que no sea ofensivo tampoco. Mantenemos esa fórmula también porque tenemos un gran respeto por el público cristiano, a ellos también les gusta, entonces nosotros le damos un “good feeling movie” a lo que hacemos. Creo que se pueden ver varias veces también. Siempre hemos utilizado actores que sean queridos por el público y hemos insertado actores internacionales en nuestras películas. Esa es nuestra fórmula básicamente.

- Hay países bastante mayores en habitantes que República Dominicana que se quejan de su escaso mercado para el cine y que, ahora mismo, pueden tener incluso menos producción que su país. ¿Cuál diría usted que es la fórmula para rentabilizar el cine con un mercado tan reducido como el dominicano?
En realidad, hay tantas producciones por el incentivo de la Ley de Cine, por los beneficios de esa Ley. Antes de que existiera, solamente se veían una o dos películas cada uno o dos años, no había mucha producción. Después de la Ley de Cine, sí hay unas 20 producciones anuales. Pero básicamente fue por la Ley, si no existiera, no habría tantas producciones porque no sería sostenible económicamente. Obviamente, con el crédito fiscal, sí se pueden realizar todos estos proyectos, pero, si no fuera así, tendríamos una o dos películas al año, que era lo que existía antes de la Ley de Cine.

- La competencia en la zona del Caribe es cada vez más encarnizada en cuanto a las facilidades para rodar, en Puerto Rico, Colombia… ¿Qué facilidades cree que pueden dar ventaja a República Dominicana?
República Dominicana tiene todas las facilidades, tanto profesionales como técnicas, para hacer cualquier tipo de producción. De hecho, el año pasado tuvimos dos producciones simultáneas de Hollywood, o sea, grandes producciones a la vez. Tenemos mucha ventaja todavía en que a la gente le gusta el cine, son muy abiertos a todo lo relacionado con la actividad cinematográfica. Otros países dicen “bueno, me molesta esa planta eléctrica”, pero en República Dominicana aún existe esa magia, y la gente se identifica con la industria del cine. Eso facilita también el trabajo a todo el mundo.

- Usted ha estado a caballo entre República Dominicana y Estados Unidos. ¿Es complicado estar a la vez en esos dos mercados?
Nuestro mercado principal es República Dominicana, pero, sí, hemos conseguido distribución y hemos salido en salas de cine. Nuestra segunda plaza es Puerto Rico, donde nos va siempre súper bien, y es como una extensión de nuestro país. De hecho, las películas dominicanas son más taquilleras en Puerto Rico que las puertorriqueñas, especialmente las comedias. Después, hemos tenido exhibiciones en cines de Nueva York, en Miami, en toda la costa este, también en Centro América hemos salido en cines comerciales… Obviamente, no es lo mismo, porque lleva una gran inversión de publicidad y son mercados que se manejan con otra cautela.

- Después de unas cuantas exitosas comedias, “Luis” marca un giro en su carrera. A casi 5 meses de su estreno, ¿qué balance haría de esta experiencia?
“Luis” es maravillosa. Realmente es la única película que he escrito y dirigido simultáneamente, todas las demás solamente las he dirigido. Tiene un mensaje muy importante, poderoso y que está logrando su cometido. Después de que salió en los cines comerciales y fue finalista en la selección de 10 o 12 festivales, ahora la estamos exhibiendo en las escuelas, porque el objetivo de la película en realidad es llevar este mensaje a todas las personas. A la gente le impacta y les gusta a todos. Para nosotros fue una alegría que todos los festivales acogieran una película de este género, que es un producto muy competitivo en todos lados. Estamos súper contentos con nuestra película.

- ¿Qué proyectos tiene y en qué dirección cree que irá su carrera?
Nosotros realmente no nos especializamos en ningún tipo de género. Nos encantan las comedias, hicimos “Luis”, que es un drama, pero estamos abiertos a hacer cualquier película. Mientras nos guste la idea, la haríamos. Ahora mismo estamos con dos películas biográficas, una sobre Vladimir Guerrero, un pelotero dominicano muy importante, que lo van a nombrar en el Salón de la Fama de Béisbol de Cooperstown en julio; y otra sobre “Enriquillo”, un indígena muy importante de la República Dominicana, que va a ser una película de época, y también la tenemos en carpeta. Tenemos unas cuantas cosas ahí. Además, vamos a producir Desiree Reyes y yo la nueva película de Marel Alemany, un director que trabaja con nosotros. Se trata de un drama que se llama “Muero de felicidad”.

- ¿Cómo productor y cineasta, qué le pediría al gobierno de su país para mejorar aún más la situación de pujanza del cine dominicano?
Realmente no hay que pedirle nada, la Ley es maravillosa y está cumpliendo su objetivo. Siempre hay opiniones en el camino, porque es una Ley nueva y se va modificando. Se hacen controles, lo que está muy bien. Yo siempre pongo un ejemplo, para hacer una película, ¿compras un cuadro o lo alquilas? Me refiero a un cuadro de decoración. Pero si compro el cuadro, ¿a quién le queda luego? Entonces, obviamente, en la Ley dice: después el cuadro alguien se queda con él, o sea que tienen que alquilarlo. Igual que un tarifario que hicieron con los sueldos de la gente que filma, todo eso se va haciendo por el camino porque es una Ley nueva. Pero al gobierno no puedo pedirle más, la Ley cumple y es una Ley para los productores locales realmente muy completa.



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